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Foto del escritorRosana Delseggio

Identidad

Si vamos a la definición de la Real Academia Española, podemos ver que hay distintas acepciones de lo que ésta palabra significa, por un lado la identidad es lo que nos caracteriza y es el conjunto de rasgos propios de un individuo o una colectividad   y también contamos con otra acepción de la palabra identidad y es  el concepto de “idéntico”  que es lo que nos hace semejantes o parecidos entre los individuos, entonces nos encontramos con un concepto que nos habla de lo que nos iguala y de lo que nos hace diferentes de los demás.

 

Y si hablamos de igualdad y de semejanza podemos ir a Génesis 1:26 que dice que fuimos creados a imagen y semejanza de nuestro Dios, y aquí nos encontramos con lo parecido, lo “idéntico” y es increíble de aceptar que toda la humanidad fue creada por quien es nuestro Dios, el mundo no acepta a quien le dio su forma y su esencia.

Por lo tanto todo ser humano creado o hijo de Dios, representa a Dios, contiene facetas que se le parecen.

 

También la identidad nos diferencia  de otros que no somos nosotros, y es ahí en donde podemos explorar una identidad personal donde las características tienen que ver con mi personalidad, mi historia familiar, mi entorno, donde vivo, mi cultura y muchas cosas más que van a definir quién soy, también podemos hablar de tener una identidad en Cristo, de quienes somos en Él, me encanta pensar en “2 Corintios 5:17 que dice que” Somos hechos nuevas criaturas”, sabemos que cuando recibimos a Cristo, ocurre una transformación en nuestro interior y comenzamos a disfrutar de nuevas realidades, por ejemplo somos hijos y ya no esclavos, somos sus amigos, somos redimidos por su sangre, somos santos posicionalmente, ciudadanos del cielo, perdonados, limpiados y podríamos mencionar muchísimas acciones que suceden en el momento de nuestra conversión, y así cobra sentido una nueva identidad que tenemos en Cristo y que no viene a anular mi identidad personal sino que la viene a potenciar.

 

Pienso que entender esto es de gran importancia para el desarrollo de nuestra identidad integral, Dios no quiere ocultar nuestras características propias, o  individuales que conforman nuestra personalidad y carácter sino que todo lo nuevo que recibimos  de manera espiritual va a potenciar la personalidad con la que ya Dios nos había creado.

 

Quiero destacar que cada individuo es único e irrepetible delante de Dios porque justamente es su creación, y el hecho de recibir a Cristo abre la posibilidad de que ese individuo pueda superar muchas de las partes que el mismo pecado había anulado, Cristo abre el camino para poder desarrollar en libertad santa y genuina nuestra individualidad, nuestro propósito único para el cual fuimos creados.

 

No hay nada más hermoso que ver a personas desarrollar sus dones, sus talentos sin necesidad de parecerse a otros, ni deseando en su interior lo que otros tienen, sino buscando desde su interior cumplir con lo que Dios preparó de antemano como dice Efesios , Dios ya pensó obras de antemano  para que nosotros  hagamos lo que ya había diseñado según su voluntad.

 

Por lo tanto al formar y conocer nuestra identidad vamos a encontrarnos semejantes o parecidos ante un Dios supremo e inigualable y por otro lado vamos a descubrir características que me hacen únicos ante las otras personas, por eso pienso que detrás de tanta crisis de identidad hay un trabajo por hacer y es realmente empezar a conocer a ese Dios al cual nos parecemos, a ese Dios que nos pasó de sus características y ver que hay una luz al final del ca



mino y es entender que somos seres únicos e irrepetibles y hasta que no hagamos propia esta verdad, no vamos a poder darnos cuenta de todo lo que Dios preparó para mi vida especialmente, y abrazar mi propósito individual que viene de la mano de quien soy.

 

Entonces si te encontrás en una de las famosas crisis de identidad desafiate a conocer al modelo al cual nos parecemos y vas a encontrarte y si ya estás en el proceso de saber quien sos proseguí a la meta de parecerte más a Cristo.

 

Lo llamativo de esto es que nuestra identidad empieza en El y también el objetivo es parecernos y ser como EL es.

 

El es el autor y consumador una vez más.

 

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